SÁNDWICH VICTORIA O BIZCOCHO VICTORIA

 

📷 ricettedalmondo.it

INGREDIENTES:

Para el bizcocho:

220 g de harina de repostería

220 g de azúcar

220 g de mantequilla

4 huevos

10 g de levadura en polvo

1 cucharadita de extracto de vainilla

1 pizca de sal

Para relleno:

150 g de philadelphia (o mascarpone)

150 ml de nata para postres

50 g de azúcar glas

1/2 cucharadita de extracto de vainilla

300 g de mermelada de frambuesa

125 g de frambuesas (frescas)

Para espolvorear:

Azúcar glas al gusto

Utensilios:

Batidora de mano o batidora planetaria

2 Moldes desmontables de 22 cm

PREPARACIÓN:

  Reblandecemos la mantequilla (manteniéndola a temperatura ambiente durante al menos media hora antes de usarla).

   Ponemos en un bol la mantequilla (blanda) junto con el azúcar y batimos con la varilla de una batidora eléctrica o batidora planetaria hasta obtener una masa blanquecina, hinchada y suave.

  Añadimos los huevos, de uno en uno, y dejamos que cada uno se incorpore perfectamente a la masa. Agregamos el extracto de vainilla.

  Añadimos la harina tamizada junto con la levadura química poco a poco y una pizca de sal y mezclamos bien.

  Una vez que hayamos obtenido una crema suave, la vertemos en dos moldes forrados con papel pergamino. Nivelamos la masa lo más posible, y horneamos los pasteles a 180°C durante unos 20-25 minutos.

  Verificamos la cocción con un palillo y cuando los pasteles estén listos los sacamos y dejamos que se enfríen por completo.

Para la crema de queso:

  En un bol añadimos el queso philadelphia, el azúcar glas, la esencia de vainilla y la nata y batimos con la batidora hasta obtener una crema suave y espumosa.

  Ponemos una primera tarta en una bandeja de servir y la cubrimos con la crema de queso (ponemos la crema de queso en una manga pastelera y la iremos distribuyendo por montoncitos), sobre la que untaremos la mermelada de frambuesa.

  Colocamos las frambuesas (lavadas y secadas con papel de cocina) sobre la mermelada.   

  Cubrimos con la segunda torta (que colocarás boca abajo, es decir con la base hacia arriba).

  Espolvoreamos azúcar glas y adornamos con frambuesas y hojas de menta.

(Si no disponemos de dos moldes, también podemos utilizar uno solo y hornear una sola tarta , luego cortarla por la mitad para rellenarla)